martes, 3 de julio de 2012

Colección de fotos post mortem

La relación entre los vivos y los muertos no ha permanecido inmutable a lo largo de los tiempos. Afirma Philipe Ariès, uno de los más grandes tanatólogos de todos los tiempos, que los cambios en esta relación suelen ser imperceptibles por rápidez o lentitud. Tal es el caso de los ejemplos que incluye el video a continuación; seguramente el arribo de la fotografía a las vidas de las generaciones que nos precedieron abrió la posibilidad para reforzar gráficamente el vínculo que sentían con sus difuntos. La tradición de fotografiarlos en su lecho de muerte no corresponde, ni mucho menos, a un afán motivado por el morbo y lo grotesco. Constituyó, sin duda alguna, el testimonio de una relación de cercanía que tenían nuestros predecesores con la muerte y los cuerpos.
Lo desagradable que algunas personas encuentran en esta práctica responde a la aplicación mental de un sistema sobre otro que remite, irremisciblemente, a la idea de rechazo a la muerte por considerarla opuesta a la vida y con ella a la producción.

Agradecimiento especial a David "Almeja" Zaldumbide por la sugerencia.