jueves, 29 de diciembre de 2016

Recorrer el Cementerio General de Guayaquil


Fuente>  http://www.ecuavisa.com/articulo/guayaquil-mi-destino/224791-guayaquil-mi-destino-recorrer-cementerio-patrimonial-guayaquil

Declarado en el año 2003 patrimonio cultural del Ecuador, el cementerio de Guayaquil es uno de los lugares más hermosos que tiene la ciudad, donde también conoceremos gran parte de su historia y cultura.
El denominado 'Recorrido de la Eternidad' inicia en la puerta número 3 en la avenida de Las Palmeras y abarca 4 rutas en las que podemos visitar las tumbas de 15 presidentes de la República como Vicente Rocafuerte, Emilio Estrada y Clemente Yerovi.
En la ruta de los próceres recordaremos a hombres ilustres que lucharon por nuestra gesta libertaria como José Joaquín de Olmedo y Francisco de Marcos.
Es así como en la ruta de los escritores  y artistas tenemos la historia de Ismael Pérez Pazmiño, reconocido periodista ecuatoriano y propietario  del diario El Universo que quiso que en su lápida conste un poema dedicado a su esposa que termina diciendo “Aún en la tumba te amaran mis huesos”.
Otra historia que conmociona es la que encontraremos en la 'Ruta de las bellas artes' y que pertenece a la joven Celeste Graciela Castillo que fallece en 1921 a los 25 años de edad. Su padre envía a construir una hermosa escultura y en su epitafio se lee “Vivió adorada y murió soñando”.
En total se contabilizan 400 esculturas que fueron construidas por varios artistas italianos entre los que destaca Enrico Pacciani, cuyas obras llaman la atención por su gran belleza y la precisión de los  detalles. Esta es una de las razones por lo que se considera como uno de los cementerios más bellos del mundo.
No podemos dejar de mencionar la primera tumba que data del año 1831 y pertenece a una niña que falleció cuando tenía un año de edad. En su epitafio su madre pide a las autoridades que jamás remuevan sus cenizas de este lugar. Y así el Cementerio General de Guayaquil está lleno de hermosas historias. Un lugar lleno de belleza y paz que guarda la memoria del Guayaquil de ayer, hoy y siempre.