Un grupo judío utiliza tecnología avanzada para trazar el contorno de todas las lápidas del antiguo cementerio del Monte de los Olivos, extensa necrópolis con 150,000 tumbas de hasta hace tres milenios.
El objetivo es fotografiar cada tumba, registrarla de manera digital, anotar cada nombre y colocar la información en línea. Eso permitiría a los visitantes orientarse en el cementerio, un laberinto de lápidas rodeado por vecindarios árabes en la Jerusalén oriental.
Descuidado durante años, es uno de los cementerios más antiguos del mundo en uso. El equipo registró unas 40,000 tumbas después de tres años de labor. Espera completar el registro de todas las lápidas intactas, 100,000 en total, para el año próximo.
Los cartógrafos revisan fotografías aéreas y consultan registros de entierros que datan de mediados del siglo XIX para anotar nombres y fechas.
"El cementerio es un espejo de la ciudad: en tiempo de guerra vemos más tumbas. Cuando llegan nuevos grupos judíos a la ciudad cambian los nombres en las tumbas", dice Moti Shamis, uno de los integrantes del equipo.
Al igual que gran parte de lo que ocurre en Jerusalén, este proyecto tiene repercusiones políticas. El grupo Elad promueve lugares de relevancia judía en Jerusalén oriental para reforzar su presencia en la parte de la ciudad que los palestinos quieren como capital.
No hay comentarios:
Publicar un comentario